jueves, 7 de mayo de 2009

Los Gatos y los Niños

Con demasiada frecuencia me encuentro en el correo peticiones de acogidas a gatos por el hecho de que han llegado niños a casa ... ya sea porque la abuela teme por sus nietos o la madre por sus hijos. El sentimiento de preocupación es lícito y la preeminencia de éstos sobre las máscotas es indiscutible. Sin embargo a veces pecamos de exceso de celo y confundimos los miedos fundados en el desconocimiento con peligros reales.
Lo cierto es que según mi experiencia, cuando llegan niños a casa, hay que temer por los gatos y no por ellos. Salvo si nos encontramos ante una alergia severa, o simplemente alergia ya que no tenemos derecho a hacerles sufrir, los gatos no suponen un riesgo en sí mismo para los niños o bebés. Como digo siempre, los comportamientos se educan, se corrigen, se dirigen. Os dejo una foto de mi sobrina ... parece una nimiedad, pero me costó lo mío que aprendiera a acariciar a la gata sin jalarle de los bigotes, darle coscorrones o tirarle del rabo.
En general un contacto adecuado de animales y niños, hace que éstos últimos desarrollen cierta sensibilidad y empatía hacia el otro a la hora de vivir en sociedad. Valores como el respeto y la responsabilidad pueden surgir gracias a estas pequeñas criaturas, aunque por supuesto nuestra actitud será muy importante ... si decimos "caca" cada vez que se aproximen a un animal o simplemente manifestamos nuestros temores, al final lo asimilarán como algo negativo ... si los criamos incapaces de sentir ternura por una gato ¿cómo vamos a esperar que se tomen en serio el cambio climático, la extinción de las especies o el respeto por otras formas de vida? Piensen.




También correteó de lo lindo al pequeñuelo, tanto que cuando ella se fue, acabó exhausto.

1 comentario:

Marta Chicote dijo...

Jolines es que yo me asombro contigo... ¡hablas siempre con tanta razón...! Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices. Siempre he pensado lo mismo. Y la verdad es que me enerva un poco cuando los padres hasta ponen unas caras de horror y espanto cuando ven que su hijito se acerca a más de 10 metros de un perro o gato... :S
Como bien dices, es de lo más sano enseñar a los niños a convivir con los animales; aprenden a respetarlos, no sólo a ellos, sino que aprenden la base del respeto y la convivencia. Es algo muy enriquecedor, aparte de que siempre es un valor añadido hacer que el niño crezca con un miedo menos.
Pero bueno la verdad es que cuando la gente se convierte en padre gana mucho, pero también pierde algo: mucho sentido común XD

PD: está precioso el pequeño!! :_D